Una forma de contarles las cosas que se me pasan por la cabeza

.... y que Uds. puedan agregar sus comentarios

miércoles, 28 de abril de 2010

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A pedido de uno de los lectores acá va uno un tema. ¿Cómo se graban datos en un CD?, elegí este pedido para hacer primero porque me pareció más fácil, y así no los tenía que hacer esperar tanto.
La cosa es más o menos SASI!!! A pesar de que los procesadores de las computadoras crecen en potencia, velocidad y capacidad (y otras muchas cosas) de fondo y muy a grandes rasgos siguen moviéndose con pasa no pasa de electricidad, y que mejor forma de representar eso que con ceros y unos, el famosos y nunca bien ponderado sistema binario.
Desde el principio de la historia del almacenamiento de datos, podríamos decir…., que se usa este criterio, ya se usaba con las tarjetas perforadas, si un pasa no pasa!!! Si hay agujero pasa, si no hay no pasa, unos y ceros!. La tecnología fue avanzando, y tratando de superarse y de superar los desgastes mecánicos de las tarjetas perforadas y de los disquetes, cada vez que los usamos hay rozamiento con una “púa”.
Supongo que alguna especie de científico loco en una trasnochada pensó en esto y dijo, si no lo toco no lo gasto! Y empezó a trabajar sobre almacenamiento óptico o como quieran llamarlo.
El CD, el DVD, el BLUE RAY y todas estos tipos de discos tienen algo en común, tienen una escritura sobre sus superficies que se puede leer como ceros y unos, pero tienen a favor que “mirando no se rompe”.
La superficie de un disco cuando se graba tiene algo llamado valles y picos, que cada uno representa un cero y un uno, ¿que es un valle? Es un punto en el disco donde la luz del laser no vuelve al lector y un pico es donde si vuelve, ceros y unos!!
Como funciona esto? Bueno, básicamente es necesario el control de dos velocidades, una angular (la del disco girando) otra tangencial (la de la lente que va de el centro del disco hacia afuera), la altura de la lente, un laser (fuente de luz coherente) un receptor de el haz, y un “decodificador”.
Con los movimientos tangenciales y angulares nos aseguramos de poder recorrer toda la superficie, se emite el haz a la superficie, y dependiendo de si vuelve o no, el receptor lee o no, y con el decodificador pasamos esa información en información útil para la computadora.
Espero haber aclarado un poco el tema y que les haya gustado.
La próxima relacionada con la razón aurea, tarjetas de crédito y otras yerbas.
Saludos.
FV

sábado, 24 de abril de 2010

Ese sabor a no se que...

Ufff… Cuanto hace que no escribía la verdad que se me esta complicando bastante pensar en un tema. Cuando creo que lo tengo lo descarto o porque creo que va a ser difícil de entender o pesado, o porque creo que lo saben todos y que no va a aportar nada a sus vidas…
La idea de este blog, originalmente era aportar datos irrelevantes, y de repente termino hablando de temas de física y química, que en realidad son dos ramas de la ciencia que me fascinan, junto a un montón de cosas que nos rodean, la verdad que todo me da curiosidad.
Recordando un poco, en mis clases de Biología del secundario, recuerdo en una explicación sobre como funcionaban nuestros sentidos la distinción entre gusto y olfato.
Fue algo que no me olvide más. El gusto que es captado por las pailas gustativas de nuestra lengua solo se divide en 5 sabores (si, 5 y no cuatro!) Dulce, salado, dulce, acido y UMAMI!!!
Ja! ¿Qué es el umami? En japonés es algo así como sabroso, es lo que captan nuestras papilas cuando las comidas tiene por ejemplo glutamatos (el más utilizado es el de sodio) o acido glutaminico. Si se ponen a mirar un poquito los packaging de los alimentos que consumimos verán que figura en más de uno!!
Bueno, volviendo al tema principal, ¿Cómo puede ser que sintamos tantos sabores si solo hay cinco de ellos? La respuesta viene en que el olfato juega el “papel principal” en todo esto. Cada vez que ponemos algo en nuestra boca sube por un conducto a nuestra nariz “partículas” de lo que estamos comiendo, y estas son captadas por nuestras papilas olfativas, y lo curioso de esto es que primero “comemos por la nariz”. Recuerdo que la profesora nos conto algo así como que cada vez que subía un nuevo olor generaba nuevas impresiones en nuestras papilas olfativas, y que cada vez que sintiéramos ese olor lo captaría esa parte de nuestro olfato, y que ese fenómeno era el que hacía que algunos olores nos trajeran recuerdos, ya que cuando lo sentíamos nuestro cerebro sabia que ya lo había sentido antes. Diría mi abuela “cosa ´e mandinga…!”.
En fin, espero que les haya gustado.
Me encantaría que propusieran temas que les interesen, sería un muy buen feedback!

Saludos.

FV